Consistió en escribir una carta explicando qué son los grupos para los chicos del nivel, enviándola al citado colegio, y realizando ellos lo mismo con nosotros. Les dejamos libertad total a los chicos de MarCha1 para hacerla, y la sorpresa fue que no es una carta cualquiera, sino es un regalo el que nos han dado, así que por eso nos gustaría compartirlo con vosotros, ya que ahí se expresa muy bien todo lo vivido por estos chicos durante estos 4 años de grupos y merece la pena leerlo. Es la siguiente:
¿Qué
son los grupos para nosotros?
Queridos gruperos:
Estamos muy ilusionados de poder
explicaros lo que para nosotros son los llamados "grupos de amistad".
Para nosotros los grupos comenzaron en
sexto, aunque realmente no nos sentimos el "quiero ser de los grupos"
hasta más tarde, ya que ese primer año se basó en simple juegos con nuestros
amigos habituales, sin cambiar de gente.
Ese primer año nos mostraron la Chispa, la
que nos enseñó que Jesús está con nosotros tanto en nuestros momentos de oración
como durante nuestra vida. También nos enseñaron el taburete el cual
se apoya en tres patas: la primera es hacer amigos, que aunque conoces a gente
nueva, conoces de verdad al único y verdadero amigo que va a estar a tu
lado para el resto de tu vida, Jesús; la segunda pata es conocerle (a Jesús),
nunca habíamos estado tan cerca de Él y ahora le vemos un poquito en cada
persona; y por último pasarlo bien, ya lo hemos dicho, no vivimos en una
Iglesia, ni rezamos cada cinco minutos, ni levitamos, simplemente es nuestra
forma de afrontar nuestro día a día tanto de forma personal como con los demás
siguiendo el ejemplo del BuenaJente. Que es él quien nos enseña a ser
coherentes y sinceros, a dar la cara por los demás, a construir la paz, a tener
un corazón compasivo, a saber perdonar, a hacer sentir querido a los demás y a
dar la cara por ellos; para así llegar a ser como Jesús. Aún en sexto no éramos
conscientes de lo mucho que aprenderíamos en tan poco tiempo.
Tras un tiempo, viernes a viernes,
empezamos a sentir que nuestro corazón se llenaba, que esto era más que ir los
viernes a hablar con un grupo de personas. Realmente llegábamos a nuestra
pequeña familia, ese grupo de personas al que cogimos cariño sin ni siquiera
habernos dado cuenta. Con ellos ha sido con quien nos hemos desahogado, con
quién hemos compartido penas y alegrías, suspensos y aprobados,
llantos y risas, y siempre nos han intentado ayudar. ¿Y esos animadores?
Que más que animadores son padres, amigos, hermanos o incluso ejemplos a
seguir.
Completando esto, hemos tenido nuestras
perfectas convivencias donde hemos conocido a personas que viven lo mismo que
nosotros pero a cientos de kilómetros. En ellas nos pasamos todo el día
gritando, cantando, jugando: son unos días increíbles. Hasta que llega el
último y sin saber por qué uno a uno nos ponemos a llorar… Una sensación tan
increíble como inexplicable.
Y aun así, después de todo, esto sigue
habiendo gente que dice que esto es una secta ya que quien lo coge no lo
suelta, pero los verdaderos gruperos saben que esto llega más allá de eso,
sabemos que esto es una familia y queremos invitaros a ser parte de ella y
deseamos que algún día sintáis lo que nosotros sentimos ahora mismo, un inmenso
deseo de compartir lo que estamos viviendo.
Esperamos que os haya servido porque a
nosotros sí, nos ha servido para darnos cuenta de que de verdad necesitamos
esta familia para completarnos.
¡Esperamos veros pronto de verdad!
¡Gracias!