Al encuentro asistieron estudiantes de muchas poblaciones y parroquias de Badajoz, así como de otras diócesis extremeñas y de movimientos juveniles de los maristas, salesianos, Juventud Estudiante Católica. Se desarrolló en el colegio de los maristas.
El encuentro comenzó con una acogida en la que los alumnos de un modo informático fueron depositando sus datos para poder conectar con ellos vía email a lo largo del curso para todas las actividades que se organicen desde las delegaciones, posteriormente jóvenes de los maristas ayudaron a conocerse y reconocerse con dinámicas apropiadas para ello. Carmen Ledesma, alumna de tercero de Educación Infantil, que el curso pasado asistió por primera vez a un encuentro de este tipo, dio testimonio del proceso vivido en su persona y en su sentido del estudio y animó a los participantes a vivir su misma experiencia. Al hilo de su testimonio los universitarios, agrupados por facultades, estuvieron planteándose su modo de estar en la universidad y lo que Dios les pedía en este momento, descubriendo que su campo principal de misión ahora es la propia universidad, que no debe ser solo academia, sino también lugar de vida. Tras la reflexión se adentraron en una oración centrada en la cruz de Cristo dirigiéndose a Dios Padre tanto desde las debilidades como de los retos que quieren asumir como jóvenes estudiantes en la universidad, y por los que quieren arriesgar a la luz de la parábola de los talentos. Se clausuró el encuentro con una cena compartida, signo de la comunidad y la familia que desean ser en el mundo estudiantil. Ahora toca ser levadura y grano de mostaza en la masa y en el campo del estudio y del quehacer universitario.
Intentaremos conseguir más fotos del encuentro. Si lo hacemos se pondrá un aviso en la página web.
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