Bueno, bueno, familia, que esto ya se acaba!
Creo que éste es el correo más difícil de escribir por lo que significa. Y es que dejamos atrás, temporalmente, eso sí, a un montón de gente que ya es parte de nuestra familia. Si vieseis las muestras de cariño que hemos recibido a lo largo de toda la semana... Ha sido precioso.
Pero vayamos por partes. La semana empezó con "harto calor", como dicen acá, y ha terminado con hartísimo calor. Qué barbaridad! Menos mal que por las noches ha refrescado un poco y se estaba en la gloria a las puertas de las casas, que si no...
Las mañanas en las escuelitas las hemos dedicado casi íntegramente a entrenar a los chicos para las miniolimpiadas que se desarrollaron ayer domingo, y a pasar computación con algunos profes. Sí, ha sido poco prolija en refuerzos escolares, qué se le va a hacer. En los entrenamientos ha habido de todo: algunos captaban todo a la primera, y con otros hemos tenido que tener más paciencia que cuando explicamos matemáticas. "Dos pasos antes de entrar a canasta, sólo dos pasos" ha sido la frase más escuchada en San Pedro esta semana. Y en Limones y Los Sotos ha sido "Que no os colguéis de la red de voleybol que la vais a fregar" (romper en boliviano)...Qué intensos han sido los entrenamientos!
Con las madres, en el último taller en cada comunidad les preparamos un cafelito, así que, además de hacer pulseras o flores de papel para la decoración de la capilla (aunque suenen fáciles de hacer, los talleres siguen siendo un invento del diablo... ¡pero cómo pueden ser tan difíciles!), estuvieron de cotilleos varios.
Y tras las misas del padrecito, con sus respectivos bautizos, tuvimos despedidas tanto en San Pedro como en Limones, donde proyectamos un pequeño montaje con fotos de los 5 años que llevamos viniendo y de las actividades solidarias que hacemos en nuestros colegios de Badajoz y Córdoba para sacar platita para los proyectos de aquí, así que algunos de vosotros son ya conocidos en las comunidades. Ni que decir tiene que les supo a poco y que les encantó. En Los Sotos también hicimos lo mismo, pero la despedida gorda la dejaron para el sábado después de las comuniones.
Más cositas...ah, la campaña de salud en la escuela. Ostras que divertido fue. Hicimos un teatrillo donde uno de nosotros hacía demuela picada, y los niños acababan a cepillazos con él. Se lo pasaron en grande...bueno, menos el que hacía de muela, que se llevaba cada paliza, jaja. Luego hicimos campaña de desparasitación, y aunque menos que otros años, han seguido apareciendo habitantes en algunas cabezas. Habitantes como para hacer de extras en Ben-Hur 2, eh? Y de un tamaño considerable además. Les hemos dejado champú antipiojos a las profesoras y se han comprometido a seguir con el tratamiento con algunos chicos. Por lo demás, fue un día muy muy gracioso, y esperemos que efectivo en cuanto a concienciación se refiere.
El viernes fue un gran día. Primero estuvimos recogiendo todos los bártulos. Vino una camioneta que cuando se terminó de llenar hubiese sido la envidia de Mudanzas Marroquín. Qué de cosas en tan poco espacio, niño: las camas y colchones que nos han dejado los hermanos del cole, más el material escolar, los enseres de cocina, las guitarras, nuestras mochilas, etc. Una locura. Después nos despedimos de algunas familias, y en Limones, se presentaron unas 20 madres con una tarta!! Qué salás. Y al llega a Roboré quedaba el plato fuerte: reunión con todingos los muchachos becados. Qué bonito estuvo. Motivación super graciosa, momento de compartir inquietudes, oración y merienda. Y encima les entregamos las camisetas de SED de este año, la de Soy Marista. Les encantó el detalle. Ya veréis la foto que nos hicimos.
Y el fin de semana, pues otros dos momentazos. El sábado las Primeras Comuniones de 11 pelados, más 3 bautizos. La celebración, preciosa, y la vivencia de fe de la gente de aquí, increíble. Un ejemplo para todos nosotros. Luego fue la despedida, con baile incluido y todo. Y en la noche, pues cena encantadora con los hermanos en la plaza de Roboré. Acabamos muertos, pero es que el domingo teníamos el último plato fuerte: las miniolimpiadas. No nos hemos reído más en la vida. Qué gracia ver a los chicos desde 5 a 12 años compitiendo con un afán...Los entrenamientos no han servido de nada, por supuesto, porque después han hecho lo que les ha dado la gana, jeje. Hubo medallas para todos y los niños, y los no tan niños, se lo pasaron en grande. Las mujeres de la comunidad hicieron comida para vender y se llenó de gente, así que todos contentos. Y para nosotros fue especial, porque en el mismo sitio estaban casi las tres comunidades juntas, con todas las madres, los niños, los mayores...Disfrutamos como enanos hablando con unos, tomando una cerveza con otros, incluso arbitrando. Un broche maravilloso a una experiencia maravillosa.
Podría decir mil cosas sobre todo lo que hemos vivido aquí, pero creo que con una basta para resumir todo: esta gente de Bolivia nos evangeliza!
Le damos gracias al Padre por permitirnos vivir esto, y os damos mil gracias a todos por habernos hecho sentir que no estamos solos en esto, que no somos más que la punta del iceberg de todos los que lo hacéis posible. Seguiremos rezando por toda nuestra familia de las comunidades, y por los hermanos maristas de Bolivia que nos acogen con una sencillez y un cariño fuera de lo normal.
Hasta el año que viene
Chao : Jesús, Alhu, Ignacio, Mercedes; Rocío, Mª José, Pepe, Goyo, (Jesús y Pilar y Pili)
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